La Navidad y el comienzo de un nuevo año, fechas tradicionalmente familiares, puede resultar una época muy dura para aquellos que luchan contra a la infertilidad.
Muchas personas mantienen sus problemas de fertilidad en privado, sin compartirlos con nadie más. Pero a menudo hay un pariente bien intencionado o un amigo que, en medio de una de las comidas que se celebran estos días, pregunta: “¿Cuándo tendréis un bebé?”, y la situación acaba con alguien saliendo de la habitación hecho un mar de lágrimas.
Si usted sabe que una pareja está haciendo un tratamiento de Reproducción Asistida, éstas son nuestras recomendaciones:
- NO pregunte si han pensado en adoptar en su lugar. ¿Por qué no? Bueno, cuesta una fortuna. Se necesitan años. Es un proceso extremadamente complejo y, como siempre, porque no sabe si ya lo han intentado.
- NO les hable de esta pareja que hizo 15 intentos fallidos de FIV, se dio por vencida, «Y luego se quedó embarazada. ¡Y el niño ahora tiene ahora 2 años!». ¿Por qué no? La persona con problemas de fertilidad con la que estás hablando ha escuchado esta historia mil millones de veces antes. Y lo más probable es que no sea su caso.
- NO asuma la causa es femenina. Aproximadamente en la mitad de los casos de problemas de fertilidad el factor masculino es el responsable. Y, sobre todo, no se trata de “echar la culpa” a nadie.
- NO diga: «Bueno, ¡al menos todavía podéis divertiros intentándolo!» O «¡Debes relajarte y ver qué pasa!». Cuando se necesita recurrir a técnicas de Reproducción Asistida, la probabilidad de que el sexo dé lugar a un embarazo es casi remota. Y probablemente esta pareja no vea en este momento ninguna diversión en el sexo, tras llevar incontables relaciones “programadas” para buscar la gestación.
- NO sugiera que cojan en brazos a su bebé. Las celebraciones familiares con un montón de bebés pueden ser un auténtico desafío. Así que si ellos no piden coger a un bebé, déjelos. Y si lo hacen, permítales cogerlo con todo el cariño del mundo.
- NO sugiera que sus mascotas son “sus bebés”. Sí, los animales domésticos absorben mucho de su amor por ahora, pero ellos buscan tener un hijo, no sustituirlo por una mascota. Hacer este tipo de comentarios, por muy amables que sean, les puede hacer sentir aún peor.
- NO diga: «Como padre…» antes de lanzar cualquier opinión sobre el mundo y su futuro. Trate de evitar decir «no se conoce el amor hasta que se tiene un hijo propio». Comentarios como estos hieren a una persona con problemas de fertilidad.
- NO les anime a probar «una vez más» si la el tratamiento que han hecho ha fallado de nuevo y lo están asumiendo. La triste realidad de la Reproducción Asistida es en que no es infalible, y dista mucho de alcanzar el 100% de éxito.
Recuérdeles que son personas muy importantes en la vida de sus propios hijos, y que siempre lo serán. No es lo mismo que ser padres, pero para estas personas significa más de lo que usted puede imaginar. Y sobre todo, dígales: «Siento que hayas pasado por esto, he oído que es muy difícil, y espero que estés bien. ¿Más pavo?»
Sara Barberi
Atención al Paciente Amnios In Vitro Project