Esterilidad hace referencia a aquellas parejas que no consiguen el embarazo. Se habla de esterilidad primaria cuando no han tenido nunca ningún embarazo y de esterilidad secundaria, cuando después de haber tenido uno o más embarazos surge la dificultad.
Existe mucha confusión sobre que son cada uno de estos términos. Y aunque en ambos casos se refiere a parejas con problemas para tener un hijo, no es lo mismo la forma de estudiar ni abordar cada uno de estos problemas.
Se habla de infertilidad en aquellas parejas que no tiene problemas para conseguir embarazos pero que no consiguen que el embarazo concluya bien, es decir sin que se produzca antes un aborto. Se habla también de infertilidad primaria cuando no han tenido antes un hijo y de infertilidad secundaria cuando ya han tenido uno o más hijos previos. Este tipo de problemas cada vez se califican más como parejas con abortos de repetición.
Como hemos dicho, el enfoque del estudio y tratamiento es completamente distinto en ambos casos. Las pruebas diagnósticas van a ser completamente distintas también. Si bien en los casos de esterilidad es muy frecuente tener que recurrir a las técnicas de reproducción asistida como la fecundación in vitro, inseminación artificial, etc., en los casos de aborto de repetición es frecuente que sea suficiente con tratamientos médicos.
En cualquier caso, debe ser su médico el que, tras conocer su caso concreto debe individualizar su estudio y su tratamiento posterior.