Cada vez hay más personas que necesitan recurrir a técnicas de reproducción asistida para conseguir un embarazo. Pero en ese tiempo hasta que comienza el tratamiento, o durante el mismo, ¿qué cosas podemos hacer desde casa? Hoy vamos a dar algunos consejos para mantener unos hábitos de vida saludables y tener una mejor salud reproductiva, algo que nos va a ayudar a mejorar el tratamiento.
En cuanto a la alimentación, es importante llevar una dieta variada, rica en frutas y verduras, si pueden ser frescas y de temporada, que nos aportarán las vitaminas necesarias; incluir pescado en la dieta y reducir los azúcares, grasas y la comida procesada. Es aconsejable realizar una dieta rica en fibra e hidratarse abundantemente, sobre todo en verano; al menos 1,5 litros al día, a ser posible con agua y evitando refrescos y bebidas carbonatadas, que contienen muchos azúcares.
Mantener unos horarios regulares y acostumbrar al cuerpo a una rutina nos va a ayudar a llevar una vida saludable, como realizar cinco comidas diarias, dormir, si es posible, 8 horas al día, evitar cenar justo antes de acostarse y no ingerir estimulantes por la noche.
Evitar los tóxicos es otro punto imprescindible a la hora de mejorar la salud en general, y la reproducción en particular. El tabaquismo tiene múltiples efectos nocivos ya conocidos, y en particular en reproducción, empeora la calidad del semen, puede empeorar la respuesta del ovario a los tratamientos hormonales y reducir la tasa de embarazo, entre otros efectos. Por lo tanto, es importante dejar de fumar si anteriormente no había sido posible. El consumo de alcohol también tiene efectos perjudiciales en el ciclo menstrual y en la formación de espermatozoides.
Para complementar una alimentación adecuada, es necesario realizar un ejercicio físico regular, que nos va a ayudar físicamente y psicológicamente. Entre sus beneficios se encuentran: una mejora de la circulación y la tensión arterial, ayuda a controlar el peso, mejora la resistencia física, reduce la sensación de fatiga, reduce el estrés, aumenta la autoestima y la sensación de bienestar, etc. Cada uno debe adaptar este ejercicio a su capacidad individual e ir modificándolo en función de su resistencia y condición física.
Y por último, es muy importante para mantener una buena salud, el aspecto psicológico. Las técnicas de reproducción asistida son, a menudo, tratamientos prolongados, que conllevan repetidos intentos y sensación de fracaso, y en los que es necesario mantenernos estables emocionalmente para poder afrontarlos de la mejor forma posible. Debemos intentar evitar los pensamientos negativos, apoyándonos en las personas que tenemos alrededor e intentar disminuir el estrés y la ansiedad. Para ello, pueden ayudarnos técnicas de relajación, el yoga, la meditación, etc., o acudir a un profesional para solicitar apoyo psicológico en el caso de que la situación nos supere. Todo esto nos ayudará a hacer frente al tratamiento de la mejor forma posible hasta que consigamos el objetivo, que es ser padres.
Dra Noelia Martínez Carrión
Ginecóloga Amnios In Vitro Project